Rebajas verano 2017: liberalizadas y llenas de oportunidades

Rebajas de verano 2017: liberalizadas y llenas de oportunidades

Las rebajas ya no son lo que eran. Desde que el Gobierno las liberalizó en 2012, se ha perdido en cierta manera su esencia, que consistía en esa cita ineludible del consumidor con las oportunidades en un cierto momento del año. Pero con su llegada, aunque menos concentrada y coordinada, siguen bajando los precios, y no podemos desaprovechar la oportunidad que nos brindan estas rebajas de verano 2017.

Antes de la desregularización de las rebajas, estas se limitaban a dos períodos anuales, en invierno y en verano, y duraban como mínimo una semana y como máximo dos meses. Las ofertas, además, debían pertenecer solo al stock las dos últimas temporadas de rebajas. Pero ahora todo eso ha cambiado y la ley permite a los comercios hacer exactamente lo que quiera y cuando quiera. Son los efectos de la globalización, y si Internet es incontrolable en materia de ofertas on line, tampoco deben limitarse las rebajas tradicionales en las tiendas convencionales. O al menos eso es lo que ha decidido el Gobierno, pese a que son muchos los comerciantes que discrepan.

El pequeño comercio considera que se ha perdido el efecto llamada de las rebajas de antaño. El hecho de que se concentraran en un momento concreto y con una duración determinada, creaba unas expectativas de compra y venta que se había convertido casi en una tradición en España. Ahora todo se disipa en el tiempo, y el período de rebajas no resulta ni de lejos tan atractivo para los unos ni tan rentable para los otros.

Además, señalan las asociaciones de comerciantes, hay que luchar contra la proliferación de outlets, que durante todo el año ofrecen oportunidades por definición, contra la venta por Internet, que procede de países de todo el mundo, donde la legislación comercial es tan diversa como distinta, y contra todo tipo de estrategias de rebajas encubiertas en forma de promociones u ofertas especiales, que es lo que hacen las grandes superficies y las multinacionales amparadas en la ley liberalizadora.

Las asociaciones de consumidores y de comerciantes calculan que durante estas rebajas de verano, que mayoritariamente se iniciaron el último día de junio en todo el país, el gasto medio en España será de 103€ por persona. Aunque algunas fuentes elevan esa cantidad hasta los 150€.

Un gasto que supondrá una subida de las ventas de entre el 2% y el 5% en las zonas de veraneo respecto a las rebajas estivales del año pasado.