Todos hemos soñado alguna vez (muchos de nosotros lo hacemos todos los días) con que nos toque la lotería y se salden todos nuestros problemas a golpe de talonario. Pero eso es altamente improbable. El azar es lo que tiene. Así que tal vez convendría buscar otras vías algo más realistas si es de ganar dinero de lo que se trata. Invertir en bolsa puede ser una de ellas. Pero para hacerlo conviene tener claras algunas cosas, tomar medidas y conocer algunos trucos que impidan que acabemos siendo unos pardillos en el parquet, que invertimos donde y cuando no toca, y vemos como todas nuestras ilusiones cotizan a la baja hasta desaparecer alejándose en dirección a bolsillos ajenos y más hábiles en sus tácticas bursátiles.
Unos consejos para invertir en bolsa que pueden parecer obvios, pero que a menudo no se toman en cuenta y resulta que el atrevimiento y la ligereza acaban por pasar factura. Así, por evidente que parezca, es primordial conocer el funcionamiento de la bolsa. Incluso históricamente, a ser posible, porque la dinámica de los mercados es cíclica y lo que ocurrió una vez volverá a ocurrir, y por tanto es previsible. En este sentido, los expertos lo tienen claro y recomiendan a quien quiera iniciarse que se lea tantos libros como pueda sobre el tema. Biografías de grandes inversores, la mecánica de los mercados o entrevistas y artículos de prensa, puesto que no puede moverse uno con habilidad en un terreno que desconoce.
Y en el mismo orden de cosas, otro consejo muy útil es que no intentes abarcarlo todo ni improvises en tus inversiones. Es muy conveniente especializarse en sectores y empresas que entren dentro de nuestro «círculo de competencia». Y es que cuando se opera en un espacio cercano a nuestra especialización laboral o afín a nuestras pasiones personales somos mucho más capaces e intuitivos pues entendemos bien las claves de un sector, las reglas del juego, y podemos prever mejor la deriva del mercado.
Algo en lo que coinciden todos los expertos en bolsa cuando de dar consejos se trata, es que todo nuevo inversor debe tener una idea clara antes de iniciarse: Debes estar mentalmente preparado para lo peor y tener claro cuánto dinero estás dispuesto a perder. Ese deberá ser tu límite. Y si cumples esta norma no escrita pero fundamental, estarás preparado para mantener la sangre fría y no entrar en pánico si se da el peor de los escenarios. Vender compulsivamente cuando se desploma un valor es un error que te puede llevar a la ruina. La bolsa es un juego que hay que saber jugar a largo plazo con paciencia y templanza.
Otra recomendación importante es no dejarse guiar nunca por los rumores, pues como su propio nombre indica no son más que eso, no realidades, y puede uno acabar metiendo su dinero en un agujero negro. Una de las pocas verdades en materia bursátil, aunque resulte poco concreta y pueda parecer poco rentable por evidente, es que en bolsa conviene comprar en época de crisis y vender cuando el mercado está eufórico.
Tampoco es aconsejable invertir todo nuestro capital en un mismo valor. Diversificar es una manera prudente de limitar los riesgos. Y ya que estamos, lo mejor es siempre escoger sociedades sólidas y de larga trayectoria para comprar acciones, pues aunque entren en pérdidas siempre será más fácil su recuperación, y bastará con tener paciencia y esperar hasta que su cotización vuelva a subir. Algo casi garantizado en según qué empresas. Obviamente a más riesgo más potencial de ganancias, pero la codicia puede ser una mala consejera.
Es por este motivo que siempre es conveniente que el dinero que vaya a destinarse a la inversión no sea un capital que podamos necesitar a corto plazo. El inversor debe tener capacidad de espera y no verse obligado a vender a destiempo al poco de invertir.
El mundo de la bolsa no es un mundo sencillo, pero con prudencia y ciertos conocimientos puede ser apasionante y muy rentable. En cualquier caso, si usted dispone de un dinero para invertir y no lo ve claro, no acaba de entender el “juego bursátil” o simplemente prefiere asegurar, lo mejor es dejarse asesorar por profesionales o colocar su capital en un fondo de gestión.
Leave a Reply