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Tipos y cuantías de las sanciones por renta incorrecta

Defraudar a Hacienda es delito. Ahí no hay debate. Pero también podemos equivocarnos en la confección de nuestra declaración de renta, y los errores, cuando son a nuestro favor, aunque sean involuntarios, no nos eximen de responsabilidad y puede tener consecuencias. Veamos cuáles son las sanciones por renta incorrecta que el fisco tiene previstas.

Tipos de infracciones tributarias

Cuando la inspección fiscal detecta una incorrección, ya sea por error o deliberado, además de hacer pagar al infractor lo que le correspondía legalmente, le aplicará también una sanción. Ésta dependerá  de varios factores, tales como el de la posible reincidencia del contribuyente o el tipo de infracción cometida en la declaración tributaria. Y en este sentido, según sea el caso, hay infracciones leves, graves y muy graves.

Las leves son infracciones que no superan los 3.000€, siempre que no se haya producido una ocultación de datos. Y en estos casos, las sanciones son del 50% del impuesto no ingresado. Las graves, por su parte, son aquellas veces en que la cuantía defraudada en una declaración de renta supera los 3.000€, y más del 10% de esa cantidad se debe a la ocultación de datos de forma voluntaria y con intención de defraudar. Las sanciones aplicables son entre el 50% y el 100% de la infracción.

Y por último, las infracciones consideradas muy graves son aquellas en que, independientemente de la cuantía defraudada, el contribuyente se ha beneficiado gracias al uso de medios fraudulentos. Por ejemplo, doble contabilidad o la presentación de facturas falsas. Lógicamente, en estos casos la Agencia Tributaria aplicará las sanciones más altas, y el porcentaje que se aplicará puede oscilar entre el 100% y 150%.

Tipos de sanciones por renta incorrecta

Ya hemos dicho que los errores involuntarios no eximen de culpa, y la sanción se aplicará del mismo modo que si ha habido intención de beneficiarse. Aunque bien es cierto que cuando se trata de estrategias fraudulentas, suelen ser casos en los que se intentan ocultar datos o aportar información falsa, y el fraude suele ser mayor, por lo que en consecuencia también lo serán las sanciones.

Pero las sanciones por renta incorrecta más habituales son a menudo producto de despistes o faltas de precisión, y no suelen ser demasiado duras.

Incorrecciones y sanciones frecuentes

Veamos algunos ejemplos de infracciones bastante comunes con sus respectivas sanciones. Por ejemplo, la obtención de devoluciones de forma indebida. Éstas supondrán el 50% o el 26,25% si no se recurre. Otro caso sería el de presentar fuera de plazo declaraciones a devolver, o complementarias que reduzcan la devolución aún no recibida, lo cual será sancionado con 100€ o 75€ en caso de no recurrir.

Otro ejemplo sería el de no comunicar a la Hacienda pública el cambio de domicilio fiscal. Una omisión que está penada con 100€ o 75€ en caso de no recurrir. Igualmente se sancionará al contribuyente si no se presenta correctamente una renta, o se hace de manera incompleta. La multa puede ser del 50% o 26,25% si no se recurre.

Conviene señalar que el contribuyente siempre podrá recurrir una sanción si discrepa con la inspección del fisco, pero no conviene hacerlo por inercia y sin argumentos sólidos. Y es que si el contribuyente no recurre la sanción, la liquidación de la misma puede obtener un descuento del 30%.

Por ello, y sobre todo para evitar casos como este último, lo más recomendable es que cuando un contribuyente tenga dudas o no esté familiarizado con los procesos de cálculo y cumplimentación de los formularios de la declaración de la renta, se ponga en manos de un profesional. O recurra a la campaña presencial que Hacienda pone a disposición de todos los ciudadanos año tras año. Incluso si una renta es sencilla y solemos dar el visto bueno por defecto al borrador, nunca está demás pedir una supervisión básica de alguien con conocimientos. Aunque sea un repaso superficial. Y es que aunque no se haga de mala fe, cada error conlleva sus consecuencias. Y estas suelen materializarse en forma de sanción.

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