Los cajeros automáticos ya no serán lo que eran
Llegan los cajeros automáticos de nueva generación. O para ser más exactos, nuevos o no, todos los cajeros deberán adaptarse para garantizar la accesibilidad a todas las personas, incluidas aquellas con discapacidad física o intelectual. Una normativa que entrará en vigor este sábado 28 de junio.
Una modificación exigida por la nueva Ley de Accesibilidad, que tiene como objetivo derribar las barreras que dificultan el uso de los cajeros a muchas personas a la hora de realizar operaciones bancarias, y asegurar así un acceso equitativo a estos servicios esenciales.
Principales novedades en los cajeros automáticos
Los cambios exigidos por la ley, en algunos casos, podrían pasar desapercibidos para muchos usuarios, en cambio supondrán una importante mejora en su usabilidad para las personas mayores y aquellas personas con problemas de movilidad. Veamos algunas de las principales novedades que exige la ley en la adaptación de los cajeros automáticos.
Nueva interfaz
La normativa establece, entre otros exigencias, que los cajeros automáticos presenten una nueva interfaz más simplificada e intuitiva, para de este modo ayudar a los clientes que estén menos habituados a tratar con dispositivos tecnológicos.
Aumentar el tamaño de letra y botones con relieve
Los cajeros automáticos deberán facilitar la visión a los usuarios con un mayor tamaño de letra, iconos, un brillo de pantalla adecuado para evitar reflejos u otros problemas visuales, y tener botones con relieve para facilitar su uso. Así mismo, los menús de servicios disponibles deberán ser claros, intuitivos y de fácil entendimiento.
Cajeros automáticos con audioguías
Otra de las novedades incluidas en la normativa será la incorporación obligatoria de audioguías para facilitar la usabilidad de las personas con alguna discapacidad de visión o cognitiva, y que de este modo puedan acceder igualmente a todos los servicios que ofrezca el cajero automático.
Eliminación de barreras físicas
Por último, todas las entidades bancarias deberán eliminar las barreras físicas que puedan dificultar el acceso a sus cajeros automáticos de las personas con problemas de movilidad.
Todas estas novedades, por supuesto, no solo beneficiarán al colectivo de personas mayores o a los usuarios con alguna discapacidad, sino a todos los usuarios en general, ya que se pretende que la utilización de los cajeros automáticos sea más cómoda y funcional.
Adaptación progresiva
Aunque la normativa entrará en vigor a final de este mes de junio, la adaptación será progresiva, y diferenciando entre los cajeros automáticos nuevos y los ya existentes.
En España hay en la actualidad unos 47.000 cajeros automáticos, y todos ellos podrán seguir operando hasta que finalicen su vida útil económica, con un límite máximo de 10 años. En cambio, los dispensadores que se instalen después del 28 de junio de 2025, ya deberán cumplir con todas las exigencias de la nueva Ley.
Por otro lado, las entidades bancarias tendrán la obligación de informar a sus clientes sobre los cajeros automáticos que ya cumplen con la normativa y cuáles están pendientes de adaptación.
Otras mejoras de la ley
Otra de las mejoras que contempla la nueva Ley 11/2023, aprobada el 8 de mayo de 2023, y que ahora empezará a aplicarse, concierne al plan formativo de las entidades financieras, que deberán formar a su personal para ofrecer un trato adecuado y adaptado a las personas con diversidad funcional. Personalizado, en cualquier caso, y útil tanto en cuestiones funcionales como de seguridad en el uso de los cajeros automáticos.
Además esta nueva normativa legal, según fuentes del Ministerio de Derechos Sociales, también establece obligaciones para garantizar la accesibilidad en productos y servicios financieros y de las aseguradoras, en el comercio electrónico, en el transporte y en la comercialización de suministros básicos como luz, agua y gas. Se extiende incluso al sector de las agencias de viajes y los turoperadores, reafirmando el compromiso del Gobierno de crear una sociedad más inclusiva para todos los ciudadanos.