¿Es recomendable pedir un préstamo personal a través del cajero automático?
Las condiciones varían de una entidad a otra, pero en esencia son muy similares. El requisito para ser beneficiario de un préstamo personal a través del cajero es ser, como suele decirse, un “buen cliente”. De hecho, estos créditos están preaprobados o concedidos de antemano a los clientes que cumplen una serie de condiciones. Es decir, el banco o la caja hace un estudio previo de los clientes susceptibles de acceder a estos préstamos a los que les comunica mediante la app, SMS o incluso en la pantalla del cajero, que disponen de un disponible. De ahí que si lo solicitamos, la concesión (o denegación) sea prácticamente automática.
Tipos de interés del préstamo personal a través del cajero
En función de la entidad, el importe del préstamo personal a través del cajero puede ir desde un mínimo de 300 euros hasta un máximo de 12.000, aunque el límite más común son 6.000 euros. En cuanto a las condiciones de pago, normalmente el periodo máximo de financiación es de 5 años y el tipo de interés varía entre el 9 y el 12%, en términos generales.
Por lo general, no existe comisión de apertura del préstamo personal a través del cajero, aunque sí puede existir algún tipo de compensación por reembolso anticipado. Por ejemplo, si el periodo restante entre la fecha de amortización y el vencimiento es superior a un año algunas entidades nos cargarán hasta el 1% del importe del préstamo reembolsado. Como hemos dicho, estos detalles varían según la caja o banco al que se solicite el crédito.
Aunque válidos para situaciones de emergencia, lo recomendable sigue siendo prever con antelación los gastos que puedas tener y estudiar las diferentes opciones que nos ofrece el mercado y revisar las condiciones con calma. No hay que olvidar que buscamos un crédito responsable. A buen seguro, con algo de tiempo encontraremos mejores ofertas y condiciones.
Recomendaciones para solicitar un préstamo personal
1. Evalúa la necesidad y capacidad de pago
- Definir el propósito del préstamo: asegúrate de tener claro para qué necesitas el dinero y si realmente es necesario pedir un préstamo.
- Calcular tu capacidad de pago: Evalúa tus ingresos y gastos mensuales para determinar cuánto puedes pagar cómodamente cada mes sin afectar tu estabilidad financiera.
2. Comparar ofertas de diferentes entidades
- Tasas de interés (TIN y TAE): la TIN (Tasa de Interés Nominal) y la TAE (Tasa Anual Equivalente) son fundamentales para comparar el coste real del préstamo entre diferentes entidades.
- Comisiones y gastos adicionales: infórmate sobre cualquier comisión de apertura, estudio, amortización anticipada, o cualquier otro gasto adicional.
- Condiciones del préstamo: plazos de devolución, importe máximo, requisitos, y flexibilidad en los pagos.
3. Revisar tu historial crediticio
- Historial crediticio: verifica tu historial crediticio en el CIRBE (Central de Información de Riesgos del Banco de España) para asegurarte de que no haya errores y de que tienes un buen perfil crediticio.
- Puntuación crediticia: manten una buena puntuación crediticia puede ayudarte a obtener mejores condiciones de préstamo.
4. Preparar la documentación necesaria
- Documentos de identidad: DNI o NIE.
- Justificantes de ingresos: Nóminas recientes, declaración de la renta, o justificantes de ingresos si eres autónomo.
- Extractos bancarios: Últimos extractos bancarios para demostrar tu capacidad de ahorro y gastos.
- Otros documentos: Dependiendo del banco, pueden solicitarte otros documentos adicionales como contratos de trabajo, recibos de hipoteca, etc.
5. Leer detenidamente el contrato
- Cláusulas y condiciones: lee y comprende todas las cláusulas del contrato antes de firmarlo. Presta atención especial a las condiciones de pago, posibles penalizaciones por impago o amortización anticipada, y cualquier otra condición específica
¿Sabías qué?
Aparte del préstamo personal a través del cajero, entidades financieras ofrecen tarjetas que permiten sacar dinero en cajeros, hacer pagos o realizar transferencias en la cuenta sobre el disponible de la tarjeta. Por ejemplo, si se tiene disponible en la tarjeta de 1.000 euros y surge un imprevisto, siempre se puede solicitar una transferencia (por teléfono, vía web o incluso por SMS) haciéndose efectiva al día siguiente.