BREEAM: qué es y cómo obtener este sello de sostenibilidad para inmuebles
En un sector tan competitivo como el inmobiliario se hacen necesarios métodos de control y evaluación tanto de calidades, servicios y grados de sostenibilidad. Y uno de los más relevantes es el certificado Breeam, cuyas siglas traducidas al castellano significan Método de Evaluación Medioambiental del Organismo de Investigación de la Construcción. Veamos en qué consiste y cómo se obtiene.
¿Qué es el sello BREEAM?
El BREEAM es el sello de certificación más consolidado en materia de sostenibilidad inmobiliaria. El sistema líder a nivel mundial evaluando y certificando la sostenibilidad de edificios y desarrollos urbanos con un enfoque integral y pormenorizado de los usos y particularidades de cada construcción, ya sea residencial, de oficinas, escuelas, fábricas o de cualquier otro tipo. Y por ello está considerado como uno de los métodos de certificación de sostenibilidad más avanzados desde el punto de vista técnico.
Origen y objetivos de la certificación BREEAM
El sello BREEAM fue desarrollado en 1990 en el Reino Unido y se convirtió en el primer certificado de construcción sostenible en el mundo. Hoy en día este certificado está reconocido en todo el mundo, y ha sido utilizado para evaluar edificios en tres continentes y más de 90 países. Veamos sus principales objetivos.
Reducción del impacto ambiental
Desde su concepción, el objetivo de este método de certificación BREEAM es promover prácticas de construcción sostenible, fomentando la reducción del impacto ambiental y la creación de espacios más saludables.
El sistema consiste en la implementación de una serie de mejoras de la sostenibilidad tanto en construcciones ya existentes como en las futuras. Medidas tales como la reducción de la huella ambiental durante la vida útil de las edificaciones y la estipulación de unos estándares de calidad que vayan un paso más allá de lo especificado en la normativa vigente.
Etiqueta ecológica e I+D
Otro objetivo del BREEAM es la implantación de una etiqueta ecológica que se sea reconocida e impulsar el I+D en el sector de la construcción. Y además, evaluar los niveles de sostenibilidad de una construcción no solo cuando está finalizada, sino en las distintas fases del desarrollo, que van desde el proyecto a la ejecución y el posterior mantenimiento.
Requisitos para obtener el certificado de sostenibilidad BREEAM
Cuando se solicita el sello de sostenibilidad BREEAM para un edificio hay que tener en cuenta los requisitos necesarios para obtener la certificación. La evaluación de la construcción se centrará en nueve parámetros en materia de sostenibilidad. Se puntuarán cada uno de estos aspectos y de la suma total dependerá la calificación medioambiental definitiva.
En función del resultado, el sello de sostenibilidad podrá clasificarse como: Excepcional, Excelente, Muy bueno, Bueno, Correcto o Sin clasificar, cuando no supera los mínimos en la evaluación.
Los 9 parámetros de evaluación BREEAM
Los nueve parámetros que se tienen en cuenta en la evaluación del método BREEAM para certificar la sostenibilidad de un edificio son: Gestión de servicios o sistemas de sostenibilidad ambiental en el edificio. Salud y Bienestar, en relación al confort de los usuarios de la construcción en cuanto a calefacción, iluminación, calidad del aire o ruido. Energía, valorando la eficiencia energética de equipamientos y la implementación de energías renovables. El cuarto es el Transporte, analizando la ubicación de la parcela, el acceso de los usuarios al transporte público, y su cercanía a servicios, accesos peatonales e infraestructuras.
La eficiencia en el consumo de agua también se evalúa para obtener el certificado. Así como los materiales sostenibles o de bajo impacto ambiental utilizados en la construcción y tratamiento de los mismos. El volumen de residuos generados en la obra también se tienen en cuenta.
En el apartado de suelo y ecología se puntúa la ubicación del edificio, el tipo de terreno sobre el que se asienta, y la protección y valoración de los recursos naturales y la biodiversidad. Y por último, se analiza la contaminación. Es decir, la minimización de la huella medioambiental.
Ventajas de contar con la certificación BREEAM
El sello BREEAM certifica las características sostenibles del edifico evaluado, lo que significa que éste se ajusta a ciertos requisitos exigidos de compromiso y respeto para con la sostenibilidad medioambiental. Lo cual conlleva una serie de ventajas económicas, ambientales y sociales.
Los edificios sostenibles garantizan la reducción de los consumos energéticos (agua, calefacción, iluminación…) y de mantenimiento. Un factor que, por un lado, aumenta el valor del inmueble. Y por otro, supone un ahorro para quienes lo habitan, ya que pagarán menos en las facturas de los suministros. Son, por tanto, ventajas económicas derivadas del sello BREEAM.
La reducción del consumo de energía se traduce también en una mayor seguridad ambiental. Una ventaja en materia ecológica. Igual que lo es la reducción de residuos, su correcta recogida y el tratamiento de los mismos.
Y socialmente, la ventaja es la mejora en la calidad de vida de las personas. Los edificios certificados son más confortables. Con espacios diáfanos con luz natural, mejor calidad del aire, entornos tranquilos y sin ruidos, etc.
Conclusión
La sostenibilidad medioambiental es una tendencia sociopolítica generalizada, y el sector inmobiliario y de la construcción no es una excepción. Y para fomentarla o garantizarla se crearon métodos de certificación para los edificios, entre los cuales se encuentra el sello BREEAM, que es el más consolidado a nivel internacional.
