Seguros para parejas: qué son y cómo funcionan
Es inevitable ir contratando seguros a lo largo de nuestra vida. Del coche, del hogar, de vida, de salud, etc. Cada uno según sus necesidades o preferencias. Pero qué ocurre cuando pasamos de ser uno a compartir la vida con nuestra pareja, y ésta también tiene sus propios seguros. Ese es un buen momento para revisar y actualizar tus pólizas. Para adaptarse e informarse sobre los seguros para parejas.
Qué es un seguro de vida para parejas
Los seguros de vida más comunes son los individuales. Los que contrata una persona para garantizar una protección financiera a sus allegados en el momento de su fallecimiento. Pero existe un modelo de pólizas de vida con una cobertura conjunta, concebidos como seguros para parejas.
Este tipo de póliza tiene como objetivo cubrir el fallecimiento de los cónyuges o de dos personas que forman una pareja. La cobertura suele incluir otros riesgos como, por ejemplo, la incapacidad permanente.
Seguros para parejas: cómo funciona el de vida
Entre los seguros para parejas el más habitual es el de vida, cuyo funcionamiento explicamos a continuación. Cada uno de los miembros de la pareja tiene un capital asegurado y unas coberturas propias y diferentes. Y es que éstas dependerán de una serie de factores individuales, tal como el estado de salud de la persona, su edad o su estilo de vida. Uno puede ser más deportista o ser fumador, por ejemplo, y la póliza lo tendrá en cuenta en esas coberturas individualizadas.
Por otra parte, los seguros de vida para parejas garantizan una indemnización que supera al capital asegurado en el caso de que fallezcan ambos al mismo tiempo.
Además, este seguro de vida para dos tiene otras ventajas interesante. Por ejemplo, suelen ofrecer descuentos en su coste total, a modo de modificación al incluir a dos personas en la póliza.
Requisitos de los seguros para parejas
El principal requisito de cualquier seguro para parejas es poder demostrar a la compañía aseguradora que la pareja convive en el mismo domicilio. Ni siquiera es necesario que la pareja esté casada. Pero hay otras condiciones.
Para poder acceder al cobro íntegro del seguro de vida en pareja, en caso de que se produzca el fallecimiento de uno de sus miembros, es necesario poder demostrar que la relación seguía vigente.
Otras ventajas de los seguros en pareja
Cuando se vive en pareja puede darse el caso de que cada cónyuge ya tenga sus propios seguros, y es aconsejable calcular los costes y coberturas para decidir si sale más rentable mantener las pólizas separadas o conjuntas. Muchas compañías de seguros ofrecen planes familiares que resultan más económicos que mantener dos individuales. Por ejemplo en los casos de las pólizas de salud, donde un asegurado puede ampliar la cobertura y añadir a la familia.
Los seguros del hogar también conviene revisarlos si nos hemos ido a vivir en pareja. La póliza cubrirá el continente, pero también el contenido, y este a menudo es la suma de las aportaciones de ambos miembros de la pareja. Y seguramente un seguro conjunto resulte más económico, que hacerlo por separado según los bienes de cada uno.
Aunque los seguros de coche son individuales, el hecho de vivir en pareja suele ser una ventaja a la hora de contratarlos. Y es que la estabilidad del conductor es una de las condiciones que abarata el precio, resultando más económico asegurar a una persona casada que a una soltera.
Unificar puede abaratar
Es muy habitual que al vivir en pareja, e incluso con nuestras propias pólizas, tener contratados seguros con diferentes compañías aseguradoras. En ocasiones, resulta económicamente interesante unificar todos los seguros en una misma compañía, lo cual nos ahorraría trámites y conseguiríamos atractivos descuentos.
Conclusión
Aunque lo habitual es la contratación de seguros individuales para proteger nuestras pertenencias o nuestra salud, también existen modalidades para parejas. Unas pólizas que además de velar por los intereses materiales de ambos pueden resultar beneficiosas económicamente.